No me he ido y tampoco he estado. Comencè a estudiar, de nuevo, y lo que creì que serìa complicado y cansado hasta el hartazgo terminò por comprobarse cierto. Estoy contento, porque es un reto denso, pero los changos se quedan diario repatingados en el sillòn sin mucho quehacer. Me da un poco de miedo. Leo hojas y hojas de cosas que no acostumbraba leer y pienso que, quizàs cuando termine, los changos hablaràn diferente, y fumaràn diferente y tendràn hàbitos que ahora se me antojan imposibles en ellos. Y no sè hasta dònde la pluma deja de ser pluma para convertirse en esa voz que va hacièndose añeja o formal o pesimista o gris o nada. O todo.
Vibras.
Oigo radio centro
digo, Oigo a Coltrane, Giant Steps
lunes, septiembre 08, 2008
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario